Blog de Marta Hazas

En El internado cada personaje es pieza fundamental de un puzzle

Marta Hazas, actriz de la serie El internado, destapa ahora su lado más cómico en la serie Generación DF Marta Hazas (Santander, 1977) cruza los límites de los siniestros terrenos de La Laguna Negra. La actriz que da vida a Amelia, la profesora de los más pequeños de El internado (los miércoles en Antena 3, a las 22.15 horas), actúa ahora en Antena 3 TV en la serie Generación DF (los lunes, a las 0.00 horas), en la que repite con algunos de los intérpretes con los que ya coincidió en la misma cadena con Impares . En el cine, su cara se había visto en películas como 8 citas y El asombroso mundo de Borjamari y Pocholo.

¿Cómo cree usted que retrata Generación DF a los treintañeros?
La verdad es que ridiculiza un poco a todos los que tenemos carreras, porque somos de la época en la que tenías que estudiar en la universidad para ser alguien. Aparte, muestra que no tenemos tantas grandes causas por las que luchar, como contra una dictadura o cosas así.

Usted pertenece a esa generación. ¿En qué se ve reflejada?
En las referencias a los juguetes de la época, como la Nancy. También me siento un poco competitiva como mi personaje. Ahora hay más trabajos importantes ocupados por mujeres y cada vez somos más iguales que los hombres, pero todavía tenemos que seguir demostrando más que ellos.

¿Para usted llegar a la treintena ha supuesto tantos cambios como reflejan la serie?
No, porque mis etapas coinciden con otra cosa. Me vine a Madrid hace cinco años y ahí sí que fue cuando noté un cambio al independizarme. Además, ahora, con 30 años, me siento en un buen momento.

Aunque tienen un guión, esta serie les da margen a los actores para improvisar. ¿Eso le gusta?
Me encanta. Creo que es un ejercicio increíble de creatividad para el actor. Y tiene un poco de teatro, de la adrenalina que te da el ir sin red. Cuando está bien planteada, la improvisación le da al formato de la televisión una naturalidad y una verdad que son muy interesantes.

Esta temporada, en El internado, estamos descubriendo los secretos de Amelia. ¿Cómo valora los cambios que ha ido experimentando su personaje?
Hasta ahora Amelia era una desconocida y en esta serie ningún personaje está de forma gratuita, la historia de cada uno es una pieza fundamental en el puzle. Habíamos visto la cara amable de Amelia y cada vez se la va a ver más lanzada y se van a entender cosas de La Laguna Negra a través de su personaje.

¿Todavía le sorprenden los giros de guión de El internado?
Sí. Es de las series que, aunque llevo ya tanto tiempo trabajando en ella, me sigo leyendo el guión entero, no únicamente mi parte, porque es como una novela.

¿Hay alguna posibilidad de nuevos encuentros con Marcos?
Las cosas han quedado en el aire, pero vamos a tener nuestros encuentros, aunque no sé cómo desembocará. No deja de ser una relación prohibida, entre un alumno y una profesora.

¿Era buena estudiante?
Sí, aunque no una empollona. Sobre todo, en literatura y arte.

¿Qué le hubiera parecido estudiar en un internado?
No me hubiera gustado nada y menos en este, que muere gente. ¡No sé cómo los padres no se llevan a sus hijos de allí! (ríe).

Usted estudió periodismo. ¿Cómo ha sido hacer de reportera en Punto doc (Antena 3)?
Como no había ejercido más que en alguna práctica en Cantabria, estuvo bien para que no sea solo un título colgado en la pared. Y me permitió vivir situaciones que no me había planteado, como convivir con enfermos de sida o participar en una redada policial.

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